martes, 28 de octubre de 2014

CURA DE PAISAJE Y LA PIEDRA VACA

Camino de La Pombie.


El pequeño Saoubiste.



En La Pombie. Catálogo de sombras.



Desde la cima del Pic Saoubiste. Colosal.



Y la piedra vaca.
En aquellos años, de vuelta de escalar, de noche, solitaria, la confundíamos a veces con este animal. ¿Lo será en realidad?.



martes, 21 de octubre de 2014

25 AÑOS. BARRANCO RUTAVIESAS

Hemos bajado juntos muy pocos barrancos aunque con Dani llegué a repetir alguna que otra vez por coincidencias de la profesión. Con Hugo nos estrenamos a la vez en esto de las primeras bajando Chimiachas unos meses antes (ver aquí).
Bueno. En cualquier caso, hace 25 años y en un día como hoy, los tres (Dani Ascaso, Hugo Biarge y Enrique Salamero) efectuamos el primer descenso del Barranco Rutaviesas.
Sabíamos que su vecino Barranco del Portet ya había sido visitado pero ignorábamos si con el de al lado sucedía igual. Resultó que no, pese a lo vistoso de su final y el estrangulamiento de más arriba. Entonces era así, el interés por estas cosas acostumbraba a ser comedido y muy puntual.

Esta foto es de junio de 2008 y se ve bien la gran cascada en activo.

Fernando nos llevó y nos trajo. Efectuamos la aproximación siguiendo la habitual del Portet y avanzando más allá hasta entrar en la cuenca del Rutaviesas. Recuerdo pasto y buenas vistas.
Fuimos muy rápidos, subiendo y bajando. El barranco resultó estar mucho menos encajado de lo que nos pareció en un principio, pero nos lo pasamos bien en el tramo central y las caidas finales.
Al rato estábamos los cuatro comiendo en Escarrilla. Fue un visto y no visto del que guardo un recuerdo amable. Otras publicaciones han sido más severas con él. Craso error, no todo son Peoneras o Gloces. Hay que aprender a apreciar a cada cual como es.


Poco después hice este croquis del barranco tal y como lo encontramos y descendimos.

lunes, 13 de octubre de 2014

25 AÑOS. SALTO DEL CARPÍN (y Lapazosa por los pelos)

Cuando rememoramos hace poco el aniversario del Furco ya dijimos de pasada que ese mismo día habíamos estado en Bujaruelo echando ojos (ver aquí). El que más ocupó nuestro interés fue el Salto del Carpín. Ya lo teníamos visto muchas veces antes a lo largo de los años, pero ahora ya era otra cosa para nosotros.


Este es el salto tal y como lo fotografié al año siguiente, el 16 de junio de 1990. Había llovido y quedaba nieve en altura, este caudal no fue el que encontramos nosotros el día que nos ocupa.

Visto lo visto, dos días después de efectuar el primer descenso del Furco, sin esperar más, Fernando Biarge y yo nos fuimos a investigar su cabecera. Esto es lo que anoté en mi agenda:


La suerte estaba echada.
En los días siguientes me fui a escalar al Pirineo y el domingo 8 de octubre resultó ser un día muy malo. El viernes siguiente, 13 de octubre, hoy hace 25 años, salió lo suficientemente bueno para efectuar el primer descenso del Barranco del Cebollar y su Salto del Carpín. Fernando nos acompañó en la aproximación y nos esperó a su final. Ramón Bitrián y yo nos metimos, con muchas ganas, dentro.
En el mismo artículo del que ya hablamos a propósito del Barranco Forcallo (ver aquí), relatamos brevemente estos momentos. El apartado del Carpín lo escribió Ramón. Es este:



Que nadie se piense que bajaba un caudal notorio (basta con ver la foto de más abajo), lo que sucedió fue que la cuerda resbalaba limpiamente rozando a lo largo de toda la plancha de roca por medio del agua y esto, unido al roce final de la visera, nos volvió harto difícil su recuperación. Llegamos a colgarnos en pleno vacío a ver si con el balanceo conseguíamos mover algo la cuerda. Nos pasamos así tres cuartos de hora pero al final, muy poco a poco, fue cediendo y conseguimos hacerla caer. No nos hacía ninguna gracia pensar en remontar por ella con el roce que se producía en el borde del desplome. Es el precio que pagamos por efectuar el descenso todo tieso por tan fenomenal tobogán. Que otra cosa íbamos a hacer...

Estos somos Ramón y yo justo al acabar el descenso. El Salto del Carpín se ve detrás y la foto nos la regaló Fernando de recuerdo.

Unos días después dibujé el croquis correspondiente. Este:


Hace ya tiempo que el equipamiento del salto final ha cambiado sustancialmente. Ver un croquis actual casi parece un ejercicio de cartografía. Me pregunto cuanta gente bajará directo por el bonito y tan liso embudo.

Esta gran cascada se ha convertido también en un objetivo preciado para quienes escalan en hielo. Pero no siempre se dan las condiciones que favorecen la formación de su estructura.

¿Y LAPAZOSA?
Ah, Lapazosa... Esto dice mi agenda:



Al día siguiente del Carpín nos fuimos directos a este barranco, mano a mano, Ramón y yo. Si se veía bonito... Nada más entrar y en seguida nos topamos con un pitón. En fin...
Pero sucedió algo inesperado que al principio no entendimos muy bien. Llegamos a una marmita-trampa y era estrecha, profunda y difícil de salir. Y no había rastro de equipamiento. ¿Cómo era posible?. Para colmo, desde allí hasta el final no había tampoco ningún material abandonado (aunque ciertamente todo se rapelaba de naturales). Llegamos a pensar que, quizá por alguna incidencia, el barranco había sido bajado solo hasta la marmita. No era así y la explicación, tan simple como real, se debía a la existencia de caudal en activo que, durante la primera, era el suficiente como para llenar la marmita y rebosar tranquilamente. Nosotros llegamos en estiaje otoñal y se había filtrado, por completo. Nos resultó poco fácil salir. Suerte que llevaba un gancho de los que se emplean en escalada en artificial y que pude fijar estirando el brazo al máximo y colocado de pié sobre los hombros de Ramón.


Este fue el gancho salvador.

Este fue el croquis que hice, tal y como nos lo encontramos un día como mañana hace 25 años:



¿Quien estuvo por delante de nosotros?.
En 1992 salió el libro de Luis Mariano Mateos con la indicación de sus aperturistas. Con el tiempo Mariano me explicó que quien reparó en Lapazosa fue su compañero habitual hasta entonces, Fernando Bringas. Él e Iñaki Cuellar fueron quienes se encargaron de su descenso y como tales aparecieron en la publicación.



Hace no mucho, el 5 de octubre de 2013, Iñaki falleció en un accidente de tráfico. Fue noticia muy comentada por la popularidad de otro de los fallecidos, Andoni Areizaga. Las numerosas noticias que dieron parte del hecho no se hicieron eco de que Iñaki formó parte de Lapazosa tiempo atrás. Vaya en su memoria...

jueves, 2 de octubre de 2014

DESDE UNA MONTAÑA A SALVO

Un buen día supimos de Poey. Ignorábamos que esa montaña/colina se llamara así. Veíamos una gran ladera de helechos, junto a Accous, con una cruz en su cima.
También aprendimos que su corazón es tan verde como su vestido, de ofita verde. Y que la montaña sigue siendo montaña por el coraje de sus vecinos. Consiguieron vencer a un proyecto de cantera. Un final feliz.
Si nos fijábamos antes, cuanto más lo hacíamos desde entonces. Hace unos días decidimos subirla. Una nueva etapa en la cura del catalogador...

La montaña de helechos y el pueblo salvador.