miércoles, 16 de diciembre de 2015

A TRAVÉS DEL BOSQUE DE PIEDRA

Volvemos al bosque de piedra. Si en la entrada anterior fuimos a su alrededor (ver aquí), esta vez lo cruzaremos de través.

En esta que nos ocupa los primeros afortunados fueron David Tomàs y Jordi Castell el 16 de mayo de 2010. Ellos efectuaron entonces el primer descenso de lo que llamaron "Canal de les Peònies", maravillosa manera de colarse por el acantilado y caer al interior de un cañón de formas tan preciosas.
Uno, que ya sabe de que van estas cosas, se imagina fácilmente la cara de satisfacción que tendrían David y Jordi bajando por aquí. Pero, no solo eso, sino habiendo subido además por tan estupenda canal como la de l'Ase y atravesando luego por una faja arbolada con tan fenomenales vistas. Nosotros salimos realmente encantados.


Hay dos proas rocosas durante la aproximación que tiene una vista especialmente buena. Esta es la segunda.


VISTA GENERAL DEL RECORRIDO
Veamos primero el recorrido completo.
Tras haber remontado por un profundo cañón, treparemos una angosta canal para atravesar a continuación hacia una amplia vallonada que, según va alcanzando de nuevo el cañón, se estrecha y zigzaguea entre estratos y agujas para descolgarse así hacia el interior.


Así se divisa desde la senda que baja de las Moletas d'Arany.
De izquierda a derecha avanza el corte profundo del ríu Matarranya (la flecha azul señala l'Estret o Gúbies del Parrissal). La línea naranja remonta por la Canal de l'Ase, la flecha rosa indica el itinerario que atraviesa hacia la Canal de les Peònies (cuyo cauce a descender aparece marcado por la flecha roja).


Fuente de las imágenes. Izquierda: aplicación Mapas de iPad. Derecha: mapa IGN 1:25000, hoja 521-I Beceite.
Naranja: Canal de l'Ase y travesía posterior (trazado solo indicativo y sin precisión altimétrica). Rojo: Canal de les Peònies. Azul claro: l'Estret (Gúbies del Parrissal). Azul oscuro: Barranc de les Palanques. Rosa: grandes bloques muy característicos.


Desde el Pas del Romeret se alcanza a ver como abandonamos y volvemos a alcanzar el cañón del Matarranya.
Flecha naranja: ascenso por la Canal de l'Ase. Flecha roja: lugar por donde desemboca la Canal de les Peònies. Flecha azul: l'Estret. Doble flecha rosa: inicio de la senda transversal.

EL CROQUIS DE LA CANAL
Es muy escasa la información existente sobre la Canal de les Peònies. Aparte de algún vídeo y unas cuantas fotografías vistas en internet, disponíamos de la ficha con croquis realizada por los aperturistas. Existe también otra ficha con su topo en la página web de Latrencaneus (ver aquí).
Nosotros realizamos el croquis que sigue:




EL ACCESO
Ya lo hemos indicado. Justo al acabar la Canal de l'Ase topamos con un senderito que la cruza y que hay que seguir hacia la derecha. Se distingue bien poniendo un poco de atención. Regularmente van apareciendo puntos rojos que confirman el itinerario. Se mantiene más o menos a nivel.
Y menudas vistas.


A poco de iniciar la senda se pasa junto a un primer promontorio con esta panorámica.
Punto azul: Barranc de les Palanques. Doble flecha roja: l'Estret (Gúbies del Parrissal). Doble flecha rosa: Canal de l'Ase.

LA CANAL DE LES PEÒNIES. Antes del acantilado
El sendero de aproximación lleva directamente al inicio: un circo rocoso pequeñito pero muy característico en medio del bosque. Precisamente este lugar de comienzo no lo teníamos claro, solo sabíamos las coordenadas GPS (y no tenemos GPS), así que damos las gracias a David Tomàs que, tan amablemente, nos sacó de dudas.
Al principio se van juntando diversos cauces sin que parezca demasiado evidente cual es el principal. Pero todos se resuelven y confluyen poco a poco.


De izquierda a derecha: el canalón del tercer rápel y dos imágenes del pasillo hundido estrecho.

Toda esta primera parte discurre bajo bosque cruzando de tanto en tanto entre estratos y franjas rocosas. En ningún momento molesta la vegetación dificultando el paso.

LA CANAL DE LES PEÒNIES. Por entre el acantilado
Es un tramo breve pero en el más genuino estilo de la zona. El cauce se las ingenia para infiltrarse muy encajonado entre altos estratos y barras rocosas. Efectúa además una caída escalonada en dos veces, la primera bien excavada en una especie de tubo y la segunda directamente en el acantilado (ambas dan sensación de más altura de la que tienen).


De esta manera se cuela la canal para caer al Matarranya. Es una llegada secreta y escondida. Aún sabiendo donde se encuentra no se advierte el barranco desde el fondo del cañón.


Este es el "callejón", con el apilamiento de grandes bloques y las muy altas y regulares paredes laterales.


El callejón acaba cayéndose por el acantilado. Un umbral bien definido da paso a una especie de tubo vertical.


 
Pocos metros después una balconada de vista amplia y maravillosa se desploma literalmente a pico.
Iniciar el rápel tiene su punto de emoción.
En las fotos izquierda y central se ven los enormes bloques rocosos, tan característicos, por los que pasa el camino del Parrissal

LA CANAL DE LES PEÒNIES. El caos final
Tras caer hasta el pie del acantilado y sin solución de continuidad, el cauce desaparece bajo un monumental caos de grandes rocas muy en pendiente. Fenomenal.


El gran caos se encuentra en la misma base del acantilado y en la imagen queda oculto por la masa de pinos.

Que buen final para semejante descenso.


Tres lugares del caos. A la izquierda y a la derecha se ven los agujeros por los que se rapela.

Izquierda: por entre las rocas vimos a otro grupo descender el aèreo rápel de salida.
Derecha: bajo el bonito bloque-cuña.

FINAL
Los pocos metros que quedan hasta el cauce del Matarranya son tan discretos que casi nada delata lo recorrido. De hecho, ni se llega a ver. Una pequeña surgencia alimenta este corto tramo y puede dar alguna pista a quien se haga preguntas (y previamente se haya acercado a esta orilla, claro).


Izquierda: la última rampa a descender; a continuación solo quedan unos pocos bloques bajo los árboles.
Derecha: esta es la vista que se tiene desde el frecuentado camino del Parrissal. Escondido entre los pinos llegan los últimos metros de la Canal de les Peònies. La flecha roja indica la escotadura por la que se descuelga y el punto rojo señala el acantilado bajo el que se inicia el caos.

CANAL O BARRANCO
Buena pregunta.
A priori un barranco tendrá una erosión hidráulica superior al de una canal, pero ¿dónde se establece el límite?
En la "Canal" de les Peònies ciertamente existe un cauce y delata su historia acuática solo en las barreras rocosas y en algunos lugares de acumulación de cantos rodados. Pero ahí están. Seguramente esa historia será muy antigua o el régimen hidráulico muy esporádico.


Izquierda: durante el trayecto van apareciendo marmitas y piedras, no siempre muy erosionadas.
Derecha: quienes sí están bien pulidos son los bolos que se extienden por la base del rápel del tubo.

La pregunta de "canal o barranco" nos lleva a la siguiente cuestión.

¿CANAL? ¿DE LES PEÒNIES?
Esa cuestión se reduce al planteamiento toponímico.
Se nos hace muy raro pensar que una cuenca de esta entidad y con un cauce (aunque escondido) presente, no tenga una denominación tradicional.
Los aperturistas dicen textualmente en su ficha:
"El nombre viene dado de la gran cantidad de estas bellas flores que hay en las pendientes de cabecera durante la primavera"
No sabemos, aunque nos extrañaría, si esta flor recibe por aquí este nombre. Y, planteada esta duda, sospechamos que si efectivamente existe un topónimo antiguo, probablemente no sea este.
Claro, también podemos estar completamente equivocados.

domingo, 13 de diciembre de 2015

ALREDEDOR DEL BOSQUE DE PIEDRA

Quien diría que puede recorrerse de esta manera un sitio así. Parece imposible. Acantilados laberínticos, desgajados en un bosque intransitable de agujas de piedra. Y sin embargo, lo es. Son tres los itinerarios que lo permiten.
Dos de ellos son bien conocidos. No así el otro, que permanece cuasi olvidado y muy poco detallado: esto, justo con un croquis del mismo, justificará esta entrada.

Beseit. El Parrissal.
El recuadro rojo señala la zona que nos ocupa.

Debemos a dos publicaciones la divulgación de los tres recorridos que, enlazados uno a continuación del otro, permiten rodear de manera circular el profundo desfiladero de l'Estret, más conocido como les Gúbies del Parrissal. Son los siguientes:

KILDO CARRETÉ
Kildo (Hermenegild) Carreté Bisbal publicó, en el nº 769 de la revista Muntanya de junio de 1990, la historia, redescubrimiento y descripción del Pas del Romeret. Incluso la portada acaparaba y anunciaba la originalidad del mismo.

Esta es la revista y la primera página del artículo. Se pueden consultar íntegramente aquí.

JOAN TIRÓN
El recorrido completo, tal y como lo comentamos en esta entrada, apareció por primera vez en este libro en el que, además de grimpar, se cuentan un buen número de curiosidades:

Joan Tirón. Grimpant pel massís del Port. Cossetània Edicions. Valls. 2004.

Aquí encontramos comentados y descritos, además del Romeret, la Canal de l'Ase y, someramente, las canales de subida desde aguas arriba.

EL RECORRIDO
Aprovecha la existencia de tres "pasos" para realizar un circuito que rodea el profundo desfiladero de les Gúbies del Parrissal.
Las vistas son formidables y el entorno geológico y forestal maravillosos para todo el que estime la contemplación de este tipo de paisaje y roca.
La historia del viejo uso tradicional de los mismos es aún más interesante y digna de valorar ante las dificultades que presentan tanto el terreno como los propios recorridos.

En las imágenes que siguen los colores identifican los lugares de la siguiente manera:


Azul claro: l'Estret (Gúbies del Parrissal), rojo: Pas del Romeret, naranja: canales de subida, rosa: Canal de l'Ase, azul oscuro: Barranc de les Palanques.

El trazado indicado para el Romeret y las canales de subida, no es en absoluto preciso sino tan solo indicativo.

Así se ven desde el sendero que baja de las Moletas d'Arany (otro extraordinario recorrido).
El terreno por donde discurren las canales de subida apenas se distingue con claridad y es mucho más complicado de lo que se adivina. El tajo de la Canal d'Ase se muestra bien a las claras.

Fuente de las imágenes. Izquierda: aplicación Mapas de iPad. Derecha: mapa IGN 1:25000, hoja 521-I Beceite.

EL PAS DEL ROMERET
Para saber la historia y pormenores de esta senda lo mejor es leerse el artículo citado más arriba (ver el enlace).
Pese a estar equipada no hay que menospreciar algunos de sus tramos.

Esta es la margen derecha tal y como se ve desde las inmediaciones del caminito que cruza por lo alto de la Canal de l'Ase.

Aquí están los puntos de partida: a la izquierda el situado aguas abajo, el de la derecha aguas arriba.

Esta es la foto que aparece en el artículo de Kildo de 1990. Comparándola con la de arriba (del 2 de mayo de 2009) se comprueba el paso del tiempo: se han desgajado bloques y la pintura se va borrando ligeramente.


Dos momentos de la senda.

CANALES DE SUBIDA
La lectura atenta del (escaso) texto y alguna dosis de intuición nos llevaron a encontrar la subida sin errores. Fue una sorpresa inesperada y resultó un ascenso bien interesante por su lógica habilidosa y sus pequeñas dificultades en las trepadas.
¿Tendrán nombre estas canales o alguno de sus pasos?

Este es el croquis que dibujé en Valderrobres a las pocas horas.

Izquierda: la bonita cornisa de la primera parte. Centro: llegando a la canal-diedro. Derecha: muros finales.

CANAL DE L'ASE
Cuando estuvimos nosotros aquella primera vez, el 8 de diciembre de 2012, estábamos dispuestos a bajar por ella rapelando donde fuera necesario. Fue una sorpresa (y una suerte, el tiempo se echaba encima) encontrarla equipada con grapas a modo de pequeña ferrata.
Por tercera vez en el día, salimos maravillados.

Así se ve la Canal de l'Ase desde el camino del Pas del Romeret. Su existencia es una suerte geológica.

Izquierda: la canal vista desde el camino que sube al Parrissal remontando el Matarranya. Centro: un contraluz que muestra la estrechez de las paredes. Derecha: la rendija llega a ahondarse hasta volverse a veces inaccesible.

La canal también tiene su inscripción. ¿Desde cuando?


Lo cierto es que tenemos la duda del nombre de la canal. Solo hemos visto la referencia de Tirón en su libro, que dice (respecto a las "canales de subida" y la "Canal de l'Ase"):
"Es tracta d'un passador que vol emular el del Romeret, aprofitant les canals que cauen pel costat dret de les gúbies (la part esquerra orogràfica), en els dos extrems de l'engorjament, i que al capdamunt de les canals segueix part del traçat del pas de l'Ase"
Parece deducirse que l'Ase es un paso (o tramo) que cruzaría por la cabecera de ambos itinerarios, y no se dice expresamente que la canal que hoy recibe este nombre lo tenga realmente.


Tres momentos de la ascensión entre bloques, pasillos y resaltes.

Resumiendo, un circuito imprescindible para comprobar lo laberíntico e intrincado del Port, inolvidable para quienes gusten de estas cosas. Y para apreciar las dificultades que antiguamente afrontaban quienes utilizaban estos lugares para su subsistencia. Cuántas preguntas acuden a la cabeza...
Hay que tener en cuenta que, si bien el Romeret y l'Ase se encuentran equipados y señalizados, no sucede igual con el itinerario de subida desde el río y se precisa ir con cuidado y atención (una cuerda y material para asegurar pueden ser recomendables).